Derrumbe
Te dejo enroscada
en tu cara de niña
con un perro a los pies
de tu sueño sigiloso
perdido en el pasillo
me embiste la tristeza
de mi ausencia de ti
en las mañanas adormiladas
que vendrán
y me siento a escribir
estos versos
para retrasar la partida
entre las cosas nuestras
el taller de tus sueños de barro
los perro sagaces
de especie compartida
las sillas blancas
bajo la sombra verdiazul
donde conversan los aguacates
el cauce del agua
que dibuja los límites
de nuestro mundo
así consigo ahuyentar
en vano la memoria
para que olvides
mi nombre en el tuyo
cuando no esté.
1 comentario:
Hermoso, mi emancipación. Amargo reto el de renunciar a dulces memorias.
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