lunes, 6 de mayo de 2013

LAUDO DEL PREMIO PEN CLUB DE PUERTO RICO


LAUDO DEL PREMIO PEN CLUB DE PUERTO RICO, CATEGORIA DE POESIA, 2011
Algunos elementos que hacen de un poemario una propuesta literaria exitosa son el que dicho proyecto presente una línea de pensamiento consistente a través de sus páginas, que su autor abrace el reto y el riesgo de escribir con originalidad desde lo humano, y que en dicho trabajo se logre la creación de un cosmos particular. La labor del editor es tan importante como la del escritor, ya que con la visión y el rigor de ambos se conforma, en gran parte, la experiencia del lector. La muestra representativa de poesía que compitió por el Premio Nacional este año se destaco por su variedad de temas y perspectivas, así como por su calidad editorial. De todas ellas, los textos premiados se caracterizaron por su planteamiento cuidadoso y sistemático de una propuesta poética que nos dejó como resultado un producto logrado y memorable. Nos place presentar los galardonados de este año y reconocer como sus textos nos sensibilizan y permiten tocar la poesía más sencilla, esencial y a la vez profunda. Dichos premios fueron otorgados por la mayoría del jurado; el 21 de noviembre recibimos la renuncia de uno de nuestros miembros.
El Premio Nacional de poesía es para Viaje a los elementos, de Andrés González, publicado por Isla Negra Editores. En esta opera prima, compuesta por "El libro de Rá" y "El libro de los elementos", se repasa la esencia del mundo mientras el lector va en un viaje de regreso a lo elemental de la emoción y del lenguaje. El sentido del tiempo y la vida se explora a través de las verdades ocultas tras las cosas más sencillas: un niño descubre el mundo de la mano de su abuelo que, a su vez, se prepara para despedirse. Si el universo cabe en una mano, ésta también es capaz de escribirlo. Con elegante sencillez e inacabable asombro, este poemario traza un camino hacia el proceso de la creación y el ciclo de la vida.

La Primera Mención le corresponde a la obra de José Maldonado Beltrán, El surco de los días, publicada por Arco de Plata Editores. En sus páginas recorremos junto a la voz poética instancias marcadas por una profunda conciencia existencialista cuyo discurso discurre desde la denuncia social hasta el planteamiento del amor en todas sus vertientes, eros y ágape. Como marco de la experiencia cotidiana aparece el paso del tiempo, inexorable, sellando en la memoria del lector la experiencia de un yo poético que ha alcanzado la madurez y desde ella es capaz de cantarle a todas las instancias de la vida. 

En este poemario encontramos una sencillez y  profundidad a lo Whitman; el uso constante de las imágenes de la naturaleza, del surco y sus frutos. La polisemia de la voz "surco" que puede referirse tanto a las líneas de expresión del rostro como al sendero trazado en la tierra, nos invitan a reconocernos uno con la realidad circundante. La voz poética nos lleva por una multiplicidad de senderos de lo cotidiano y nos invita a mirarlos desde una óptica en la que lo elemental se transforma y trasciende al plano de lo asombroso.
La Segunda Mención, El jardín en luto  de Miguel Angel Nater, publicado por Erizo Editorial, busca enredar a su lector en la madeja de Ariadne con la que lo remonta a un espacio mítico, recinto barroco de la búsqueda de la perfección de la palabra. A través de sus páginas encontramos a una voz que le canta insistentemente, reiterativamente y a la vez, angustiosamente al ser y a la existencia. Al estilo de vuelo de un Altazor niezscheano, desde la primera página de este logrado proyecto poético se plasma el viaje del héroe, del dios mitológico y la angustia, la denuncia y la tristeza que le rodea. Sin embargo, la belleza de la palabra y el amor que solo emana con ella constituye el espacio de redención necesario para continuar el camino. Tal y como dice el mismo poeta: "Sígueme nombrando, / sígueme en silencio por el arte, / por este deshojado pájaro  sin nombre..."
Dra. Angela Valentin Karen Sevilla

PREMIO PEN CLUB DE PUERTO RICO